Niños y niñas soldado existen en lugares como Afganistán, Myanmar, Chad, Colombia, Filipinas, India, Irak, Palestina, República Centroafricana, República Democrática del Congo (RDC), Somalia, Sri Lanka, Sudán, Tailandia y Uganda. Pero no solo el Tercer Mundo es testigo de este abuso, ya que ejércitos de países tan desarrollados como EE UU, Gran Bretaña, Nueva Zelanda y Australia también tienen en sus filas a chicos y chicas que no alcanzan la mayoría de edad.
La misión es clara: acabar con la existencia de los niños y niñas soldado y lograr su reinserción en la sociedad mediante programas de reunificación familiar, asesoramiento social, educación y formación profesional.
Tal y como se establece en los Principios de Ciudad del Cabo (1997), un niño soldado es toda persona menor de 18 años que forma parte de cualquier fuerza armada regular o irregular en la capacidad que sea, lo que comprende, entre otros, cocineros, porteadores, mensajeros o cualquiera que acompañe a dichos grupos, salvo los familiares. La definición incluye a las niñas reclutadas con fines sexuales y para matrimonios forzados.